Uno de los fines del cine es llevar al espectador a lugares que normalmente no podría llegar. Aunque algunos films recurren al eye candy para suplir falencias narrativas, ¿quién no ha querido visitar un país después de sentir que lo ha recorrido mientras ve una película?
A continuaciones enumeramos cinco trabajos que te harán querer empacar tus maletas para visitar Europa lo antes posible. Vale aclarar que estas películas no están aquí por su calidad, ya que en la mayoría de los casos, es casi inexistente, sino por qué tan atractivas son sus locaciones de rodaje.
5. Bajo el sol de Toscana (2002)
Lugares de Rodaje:
Italia: Toscana; Florencia; Roma; Arezzo; Positano
Probablemente la película con más inconsistencias argumentales que verán aquí, Bajo el sol de Toscana, adaptada de la novela del mismo nombre pero alterada para acomodarse a la necesidad del guión de la directora Audrey Wells, sigue a una escritora (Diane Lane) que, para recomponerse de la ruptura de su matrimonio, compra impulsivamente una villa en Toscana, Italia.
Si las casi dos horas de la película son tolerables, es por la energética perfomance de Diane Lane. Aunque regresando al principio de este artículo, la mayoría de estas películas sólo están aquí por las locaciones donde han sido filmadas, y después de ver Bajo el sol de Toscana, la idea de visitar Italia se incrustará en ustedes por toda una semana.
4. Un buen año (2006)
Lugares de Rodaje:
Francia: Cucuron; Vaucluse; Bonieux; Gordes; Ménerbes
Para una comedia que reconoce la importancia del timing, Un buen año fracasa totalmente en ello. Ridley Scott se propuso a trabajar en una comedia romántica (estamos seguros que fue su primera y última) como un desafío, pero su segunda colaboración con Russell Crowe (vendrían la grandiosa Gangster americano, la mediocre Red de mentiras, y la mundana Robin Hood) después de Gladiador no pudo encantar a la crítica. Al menos, nos permitió conocer a Marion Cotillard.
En el film, Crowe interpreta a un inversionista británico que viaja hacia Provenza, una provincia histórica del sudeste de Francia, para hacerse cargo del viñedo que heredó de su tío.
La historia supone la transición de un engreído hombre de negocios a uno que regresa a sus raíces y al lugar donde creció. Es inevitable pretender que no sabemos a dónde se dirige la historia, pero sumado al carisma de Crowe, las locaciones cumplen para hacer de Un buen año un deleite visual.
3. Cartas a Julieta (2010)
Lugares de Rodaje:
Italia: Verona; Toscana; Siena
De todos los trabajos que intentan referenciar ¨sutilmente¨ el romance entre Romeo y Julieta, Cartas a Julieta del director Gary Winnick debe ser uno de las peores. Y es que la premisa es una, pero termina siendo otra.
En la comedia seguimos a Sophie (Amanda Seyfried), una joven escritora que viaja hacia Verona, donde encuentra a un grupo de mensajeras que se encargan de responder (en nombre de Julieta) la correspondencia de decenas de desesperadas mujeres. Una de esas cartas, de casi cincuenta años de antigüedad, le pertenece a Claire (Vanessa Redgreave), quien después de tantas décadas quiere encontrar a su media naranja.
Con la búsqueda del antiguo amor de Claire de por medio, tenemos una buena excusa para recorrer locaciones atractivas como Veneto, región situada al noroeste de Italia reconocida por su comida y su arquitectura gótica
2. Vicky Cristina Barcelona (2008)
Lugares de Rodaje:
España: Barcelona; Asturias; Oviedo
Aunque algunos no quieran admitirlo, Woody Allen es un tesoro nacional. El tipo de cine que hace puede estar cargado de temáticas supersticiosas y existenciales, pero es tan extrovertido que parece que sólo pone la cámara a rodar para que sus actores improvisen sus líneas.
En el cine de Allen las locaciones tienen casi el mismo nivel de protagonismo que los actores, a quienes usualmente seguimos en largas tomas secuencia mientras caminan sosteniendo pláticas casuales, o a lo mucho trágicas.
1. Mammia Mia! (2008)
Lugares de Rodaje:
Grecia: Skopelos; Skiatos; Damouchari
Marruecos: Marrakech
Mamma Mia! no es el mejor musical, pero es uno bastante disfrutable. Claro, si olvidamos la terrible voz de Pierce Brosnan. La película no sólo es especial porque su elenco, encabezado por Meryl Streep y Amanda Seyfried, olvida todas sus inhibiciones durante los números musicales, sino también porque su banda sonora está compuesta por hits de ABBA como “Gimme! Gimme! Gimme! (A Man After Midnight)”, “Dancing Queen”, y “Waterloo”.
La directora Phyllida Boyd saca provecho de los temas musicales para montar números que nos llevan desde la hermosa playa de Kastania hasta Agios, un colorido poblado costero.
