3. Boyhood
No hay mucho que decir sobre Boyhood además que es algo absolutamente único que el cine hasta el año pasado no había ofrecido: la oportunidad de ver a personas crecer y madura en tiempo real sin la necesidad de maquillaje, accesorios, o efectos visuales.
Linklater es un director que tiene una fascinación con el efecto del tiempo en las personas, y ya lo ha estudiado con la coming-of-age, ‘Dazed and Confused’ y la trilogía de ‘Before’, en la cual seguimos la vida de una pareja durante casi 2o años. Boyhood no es muy diferente, pero es una de las películas más puras y reales que he visto en toda mi vida.
