Por Julio Fernando Navas
Fuera justo asumir que después de los sendos fracasos de Los cuatro fantásticos y Batman V Superman: el origen de la justicia, los estudios aprenderían a no intervenir en el proceso creativo de sus directores. Escuadrón Suicida, la película que se suponía iba a encarrilar el Universo Extendido de DC y de paso “acabar con Marvel”, es el más claro ejemplo de aquello, porque es un verdadero desastre. Y Warner Bros. no es la única culpable.
Por meses, Escuadrón Suicida se había erguido como la película que iba a purgar los pecados de Batman V Superman, pero después de ver el film es realmente complicado determinar cuál es peor o más inconsistente. Lo cierto es, que mientras Zack Snyder esté abordo (incluso se reveló que dirigió una escena) de este universo mediocremente imaginado, DC está corriendo una carrera que no puede ganar. Claro, asumiendo que ya empezó a competir.
La existencia de Superman y otros “meta-humanos” es algo que tiene realmente inquietado al Gobierno de los Estados Unidos. Desde Gótica, Amanda Waller (Viola Davis), una oficial del gobierno, propone la idea de armar un equipo de lo peor de lo peor (conformado por la novia psicópata del Joker, Harley Quinn — Margot Robbie —; Deadshot — Will Smith —, un tirador con habilidades letales; Boomerang — Jai Courtney —, un australiano con mala actitud; Killer Croc — Adewale Akkinouye-Agbaje — un sujeto con facciones reptilianas; y Diablo — Jay Hernández —, un pandillero capaz de manipular fuego) para que esté a disposición suya y bajo las ordenes del Coronel Rick Flag (Joel Kinnaman) para llevar acabo misiones peligrosas a cambio de una reducción a sus sentencias.
A partir de la inesperada catástrofe crítica y comercial de Batman V Superman, Warner ordenó que se graben nuevas escenas para alivianar el tono de Escuadrón Suicida, las cuales de acuerdo al director David Ayer, no estaban destinadas para comprometer o alterar bajo ningún concepto el tono sombrío de la película. Escuadrón Suicida quiere seguir el patrón visual establecido por Batman V Superman, pero asimismo, quiere ser lo más colorida e intrépida posible dentro de un mundo que es tan sucio como sus antihéroes.
Es evidente que Ayer tenía una visión para ésta película, y no es que quiera defenderlo de este desastre, pero es tan claro como el agua que los reshoots afectaron en gran medida el tono que el director estaba buscando. La comedia en cualquier genero no es mala bajo ningún contexto, pero hay un problema cuando se escriben escenas pensadas para hacer reír al espectador que para contar una historia competentemente, y ese es uno de los problemas más grandes de Escuadrón Suicida.
Al igual que Batman V Superman, ésta es una película terriblemente escrita. La única diferencia es que Escuadrón Suicida dedica casi todo su primer acto en presentarnos a estos antihéroes sin personalidad de tal forma que sólo conocemos sus habilidades y el motivo por el cual están encerrados. El Deadshot de Will Smith es la única excepción, pero de ahí, nada más. Por como Escuadrón Suicida está escrita, parece una recolección de escenas juntadas sin la mas mínima noción de coherencia narrativa. Y por si no fuera poco, la película continúa acentuando las conexiones con la Liga de la Justicia, como que si Batman V Superman no haya sido suficiente.
Ahora, con el poco material que el guión ofrece, Will Smith, casi demasiado bueno para esta película, es el único que logra hacer progresar a su personaje dentro de la historia, y no sólo eso. Es el único actor, junto a Margot Robbie, que provee una sensación de protagonismo en una película que, pasada la introducción de los personajes, suplica por ello. Si Will Smith y Margot Robbie son lo mejor que Escudrón Suicida puede ofrecer a nivel actoral, el Joker de Jared Leto y la Enchantress de Cara Delevingne son lo peor. Tanto se había hablado de cómo pasmaría a todos con su caracterización, pero lo único que hizo fue apartar aun más el inigualable trabajo de Heath Ledger en The Dark Knight. La historia que el Joker sostiene con Harley Quinn en este film parece salida de una telenovela de Televisa. Asimismo, es increíble el protagonismo que se le es dado a una no actriz como Delevingne, quien no puede diferenciar entre modelar y actuar. Dos cosas completamente distintas.
Desde el cover de “Bohemian Rhapsody” de Panic! at the Disco hasta “Without Me” de Eminem, podrían lanzarse dos álbumes de todo el Soundtrack de Escuadrón Suicida. Sin embargo, el problema de la excesiva inclusión de canciones es que, en comparación a Guardianes de la Galaxia, donde la música tiene peso emocional y narrativo sobre los personajes, en Escuadrón Suicida son incluidas para alimentar el afán de que es una película madura que sabe divertirse.
Lo mejor que le podría pasar a Marvel Studios es que DC Films haga buenas películas. La competencia es buena, pero por ahora, y con Zack Snyder como la mente maestra orquestando este defectuoso universo, el único enfoque de DC debería ser realizar algo bueno para variar. Escuadrón Suicida es como una cuarentona que quiere parrandear como una de veinte. No es lo que el DCU necesitaba.